gestion emocional

¿A veces pierdes los nervios o te sientes triste sin saber por qué? Aprender a manejar las emociones es indispensable para el desarrollo personal y el bienestar. Además, es indispensable para las relaciones interpersonales y la convivencia en general. La gestión emocional está relacionada con ser conscientes de lo que sentimos y lograr que esto vaya en armonía con nuestros pensamientos y acciones. Veamos 5 claves para una adecuada gestión emocional.

La inteligencia emocional es un conjunto de habilidades psicológicas que permiten apreciar y expresar de manera equilibrada nuestras propias emociones, entender las de los demás, y utilizar esta información para guiar nuestra forma de pensar y nuestro comportamiento.

1. Para todos los días a escuchar tus emociones

No esperes a la gran tormenta emocional para tomar medidas: cada día sientes y necesitas procesar lo que vas sintiendo. De lo contrario, te explotará en el peor momento y acabarás por ser víctima de un secuestro emocional. Un buen hábito para poder manejar tus emociones es que cada día dediques un tiempo a pararte y escuchar tus emociones. Podrás percibir rabia, tristeza, alegría, ilusión, preocupación, agradecimiento u otras emociones más o menos claras o sutiles. Un autoconocimiento de tus emociones es el primer paso de la autogestión.

2. Acepta lo que no puedes cambiar

Si hay algo que te preocupa, párate a comprender en qué medida esa emoción depende de las circunstancias o de tu actitud. Hay un proverbio oriental que dice ‘El dolor es inevitable, pero el sufrimiento es opcional.’ La gestión emocional es la que permite que procesemos el dolor y lo aceptemos, sin caer en un bucle negativo de sufrimiento sin medida. Una vez aceptadas las emociones, sean positivas o negativas, es momento de poder enfocarse en lo más positivo para seguir adelante, aprender y crecer.

3. Empatiza

Aunque la mayoría de nosotros no hemos sido entrenados ni educados para saber empatizar con los demás, nunca es tarde para aprender. La empatía está relacionada con el manejo de las emociones, porque una correcta gestión emocional con uno mismo es condición necesaria para poder escuchar y estar abiertos a los demás. Una vez nos escuchamos y comprendemos, podemos escuchar y comprender a otros. En esa empatía hacia los demás ampliamos nuestro abanico emocional con los demás, y nos ayuda también a comprender y gestionar las emociones en el contexto de la convivencia con los otros.

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